Campeones
Julio 16, 06

Hace casi un año pasabamos el trago amargo del no-triunfo en la ciudad de Pachuca. En aquellos momentos pensábamos no regresar más a dicho concurso, pero después de un tiempo la cabeza se enfría y uno lo piensa mejor.

Hoy, volvíamos a la misma ciudad, a la misma categoría pero con un ánimo renovado. Como en otros años, nuestro primer concurso era tardío, ya en Julio, sin embargo, conocedores de la importancia de una buena preparación, llegábamos en un estado excelente a este evento.

Llegamos a las 11 de la mañana, y entre los preparativos, ensayos y junta previa se fué el tiempo. Ni siquiera nos habíamos detenido a pensar en el evento, en lo que nos rodeaba, cuando nos avisaron que el escenario ya esperaba por nosotros. Gracias a Dios, siempre hemos tenido la grata experiencia de una respuesta favorable del público, pero lo que este día se vió en el Teatro San Francisco fue maravilloso.

El público aplaudió, ovacionó como nunca lo había hecho, había expresiones de contento, de alegría y la confianza de haber hecho en escenario lo que se tenía preparado. Luego participaron la Rondalla del Tecnológico de Puebla Exalumnos y la Rondalla Real de Cuernavaca, campeones defensores de la categoría. Como ya es una tradición en Pachuca, algunas rondallas participantes decidieron ofrecer algunas melodías al público asistente mientras el jurado deliberaba, en esta ocasión nosotros nos sumamos e interpretamos nuestro Ensamble Kapaz y Me haces falta.

La gente apludía, cantaba, coreaba y nosotros estábamos felices. Después, la entrega de los premios. Como ya es una costumbre, nos hallamos en la encrucijada entre primero y segundo lugar. En esta ocasión conocimos al segundo y con ello nos supimos campeones, un logro soñado desde hace mucho.

Pero nuestra alegría fue compartida por las personas que nos acompañaron a esta aventura y por las rondallas de la Unviersidad Madero y Nostalgia de Puebla, ganadores de las categorías B y A, respectivamente, y dignísimos representantes de nuestra ciudad.

Puebla volvía a brillar, y nosotros poníamos nuestro granito de arena para que esto sucediera. ¡Felicidades Clásica, CAMPEONA DE CAMPEONAS!